
Todo lo que sea proteger la vida, la naturaleza, los seres vivos... me parece genial. Ahora, que nuestros políticos, puestos a pensar y llevar a cabo iniciativas para el bien de la mayoría, prioricen esto... me parece alucinante.

Nadie duda de la importancia de preservar a las especies en extinción, pero resulta muy llamativo que se intente equiparar en derechos como la vida y la libertad a los seres humanos y los chimpancés. Incluso se incluye una enmienda pidiendo que se prohiba experimentar o investigar con estos animales que, por su lugar en la evolución, son los que más se nos parecen.
Sin embargo, no tenemos ningún problema en investigar con embriones humanos, con seres humanos (¡vivos, nacidos!!!). Tampoco "queda bien" defender el derecho a la vida de seres humanos en cantidad de situaciones (nacidos y no nacidos, torturas, abusos... uff). Lo dicho. Por desgracia, en muchos lugares hay seres humanos, que visto así, preferirían haber nacido simios.
¿Cuándo será tan progre y bien visto defender sin límites la vida humana y la libertad?
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