lunes, 31 de octubre de 2011

ENTRE HALLOWEEN Y LOS SANTOS, LA MUERTE Y LA VIDA

Cada año por estas fechas me surgen los mismos interrogantes... No se trata de jugar a buenos y malos o "los unos y los otros"... No... No es tan claro. Pero no deja de ser curioso que a muchos les cuesta -dicen ellos- creer en "otra vida", en "algo más" después de esto, en Alguien que nos espera al final de nuestros días... Y a la vez, les resulta facilísimo celebrar una fiesta de un gusto cuestionable, en que todo se llena de lápidas funeraris, telerañanas, huesos, cadáveres redivivos y medio descompuestos, ojerosos, enfermos, medio muertos...
Es decir, parece que resulta más creible y deseable adentrarnos en el mundo de la muerte que en el de la vida, en el de la descomposición que en el de la transformación, el de la reencarnación que en el de la resurrección, el de la angustia que el de la paz, el de las sombras que el de la luz...
Repito: no se trata de dividir la realidad en dos bandos... Las cosas no son tan simples. Pero cuando se nos da la opción de elegir y elegimos halloween, consciente o inconscientemente, sería deseable que no nos dejara indiferentes y dedicaramos un par de minutos a pensar por qué.
Al fin y al cabo, la necrofilia es un trastorno regulado en los manuales de psicología...

jueves, 27 de octubre de 2011

TE REGALO MI SOMBRA

Este es el título de una preciosa canción de Migueli. Pero además es toda una declaración de intenciones y, ¿por qué no? un regalo que hoy nos hagamos unos a otros, ¿no te parece? Escúchala, gústala, créetelo...
Te regalo mi sombra

Te regalo mi sombra para el sol del camino
para andar a tu lado rendido.
Te regalo mi sombra pa' que sigas conmigo
para hacerte más leve el camino.
Te regalo mi sombra y mi amor y mis vicios,
lo que soy, lo que tengo de amigo.
Te regalo mi sombra si te sientes perdido,
no soy guía, pero quiero ir contigo.


Te regalo mi sombra en tu duro destino,
sin futuro el temor es de niños,
Te regalo mi sombra
aunque a veces insisto
en ser yo quien perdí mi sentido,
Te regalo mi sombra
todo lo que me atraso,
pa también reposar en tus brazos.
Te regalo mi sombra
humilde en tu castillo,
porque a veces son fríos los pasillos.
Te regalo mi sombra
y mi amor y mis vicios,
lo que soy, lo que tengo de amigo.
Te regalo mi sombra
si te sientes perdido,
no soy guía, pero quiero ir contigo,
contigo.

lunes, 24 de octubre de 2011

CON PALABRAS DE CLARET: ¡FELIZ DÍA!

"Amando a Dios de veras y andando continuamente a su divina presencia, dirigiréis a su mayor honor y gloria todo cuanto haréis y diréis; como a un amigo, os dirigiréis a Dios con toda confianza, y como un fiel siervo, todo lo haréis en obsequio suyo. 
No os aconsejo que aumentéis el número de cosas que ya estáis haciendo por Dios; no todo lo podéis hacer vos, ni Dios pide imposibles. Dios lo que quiere de vos es que hagáis bien lo mismo que estáis haciendo con paz interior, con silencio, sin quejas ni lamentos de los prójimos ni de las cosas, sino que todo lo hagáis con constancia y suavidad, creciendo cada día en la pureza y rectitud de intención de parte del corazón. 
Con estos dos pies habéis siempre de caminar a la perfección en la presencia de Dios, pensando que Dios os mira continuamente y que se complace en todo lo que estáis hacien­do, diciendo y pensando." 
(Claret. Carta ascética, II. Espiritualidad seglar)

domingo, 23 de octubre de 2011

LO QUE MÁS OCUPA MI CABEZA Y CORAZÓN ES...

En este tiempo se cumplió en mí aquello del Evangelio de que las espinas habían sofocado el buen trigo. El continuo pensar en máquinas, telares y composiciones me tenía tan absorto, que no acertaba a pensar en otra cosa. ¡Oh Dios mío, qué paciencia tan grande tuvisteis conmigo! (...) Todo mi objeto, todo mi afán, era la fabricación. Por más que diga, no lo encareceré bastante; era un delirio el que yo tenía por la fabricación. ¿Y quién lo habría de decir que esta afición tan extremada era el medio de que Dios se había de valer para arrancarme del amor a la fabricación? (...) A los últimos días del año tercero de hallarme en Barcelona tan aficionado como he dicho, al asistir en los días de precepto a la santa Misa tenía trabajo grande en desvanecerme de los pensamientos que me venían, pues que, si bien que a mí me gustaba muchísimo pensar y discurrir sobre aquellas materias, pero durante la misa y demás devociones no quería, las apartaba, las decía que después ya me ocuparía de ellas, pero que ahora quería pensar en lo que hacía y rezaba. Eran inútiles mis esfuerzos, a la manera que una rueda que anda muy aprisa, que repentinamente no se puede detener. Cabalmente, para mayor tormento, durante la misa me venían ideas nuevas, descubrimientos, etc., etc.; por manera que durante la misa tenía más máquinas en la cabeza que santos no había en el altar. En medio de esta barahúnda de cosas, estando oyendo la santa Misa, me acordé de haber leído desde muy niño aquellas palabras del Evangelio: ¿De qué le aprovecha al hombre el ganar todo el mundo si finalmente pierde su alma? Esta sentencia me causó una profunda impresión... fue para mí una saeta que me hirió el corazón; yo pensaba y discurría qué haría, pero no acertaba (cf. Autobiografía Claret 65-68).
¿Cuáles son tus "máquinas, telares y composiciones" que te ocupan totalmente y te tienen tan atrapado que ya manda más en ti que tú mismo?

sábado, 22 de octubre de 2011

PONER TODA MI CONFIANZA... ¿O SOLO UNA PARTE?




"Dios quiere que pongas toda tu confianza en él; no parte en él y parte en ti, sino toda entera en el Señor. Te quejas de que no te salen bien tus proyectos; es porque no es Dios quien mueve tus designios. ¿Y quién es, pues, el que los mueve? Es tu ambición, tu avaricia y tu sensualidad. Te comprometes en abrazar el estado del matrimonio sin consultar al Señor en la oración, ni consultar tampoco si es esa tu vocación. Emprendes un pleito sin tomar consejo de alguna persona de bien, y si por casualidad tienes algún buen resultado te envaneces luego. Eres de aquellos de quienes dice la Escritura que se fían en su virtud, y que ponen toda su confianza en sí mismos. Te vales de caminos ilícitos, de rodeos y trampas para ganar aquel pleito, de remedios supersticiosos para recobrar la salud, descuidas tu salvación, te metes en embarazo de negocios porque pones toda tu confianza en tu espíritu y en tu actividad, en lugar de ponerla toda en Dios, o si acaso recurres a Él es cuando se te siguen algunos malos sucesos, o cuando todo te abandona: y ten entendido que Dios solo quiere ser tu recurso desde el principio, y no a falta de otros(Sobre la confianza en la providencia, homilía del P. Claret. Extraído de “Colección de Pláticas Dominicales” D. Antonio María Claret y Clará, Arzobispo de Trajanópolis,Tomo I, p 282, Librería Religiosa 1862)

Y tú, ¿qué "parte" de tu vida dejas aún fuera del cuidado y la mirada de Dios?

viernes, 21 de octubre de 2011

LO QUE MÁS MOVÍA A CLARET



Quien más y más me ha movido siempre es el contemplar a Jesucristo cómo va de una población a otra, predicando en todas partes; no sólo en las poblaciones grandes, sino también en las aldeas; hasta a una sola mujer, como hizo a la Samaritana, aunque se hallaba cansado del camino, molestado de la sed, en una hora muy intempestiva tanto para él como para la mujer” (Autobiografía Claret 221)


Y a ti, ¿qué es lo que más te mueve?

miércoles, 19 de octubre de 2011

SER LO QUE SOMOS TAMBIÉN EN LA ENFERMEDAD, AÚN SIENDO JOVEN


Se acerca la Jornada Mundial de misiones (DOMUND) y la fiesta del P. Claret, un gran misionero. Por eso, compartimos el testimonio de Ildefonso Luis García, estudiante Claretiano en Granada, 25 años. Ha sido diagnosticado de cáncer en la glándula suprarrenal y ahora está en fase paliativa. Escribe esta carta a su Congregación, expresando cómo ha vivido este tiempo y cómo se encuentra ahora. Pero puede ser un testimonio que nos ayude a todos, consagrados y no consagrados, mayores y jóvenes, sanos y enfermos, casados y solteros, creyentes y no creyentes... 
Que su vida nos ayude a cada uno a mirar la nuestra de frente, sin miedo, con sencillez y valor, delante de Dios, quien nos llama a la vida y nos envía.



Queridos hermanos de Congregación: 

Aprovecho estos días de vacaciones para compartir con sencillez mi último año y medio como Misionero Claretiano en formación. Sobre el 23 de Mayo de 2010 acudí a urgencias por fuertes dolores debajo del costado izquierdo. Varias horas más tarde habiendo experimentado nerviosismo e incertidumbre por los dolores que padecía me diagnosticaron un tumor maligno surgido en la glándula suprarrenal izquierda. Estuve varios días ingresado porque los médicos querían operar inmediatamente, pero no podían hacerlo hasta lograr estabilizar ciertas constantes que el tumor había desequilibrado en el cuerpo. Fueron días de mucha paz interior y serenidad externa. Dios amor, tomó mi frágil cuerpo, mi pobre fe, mi confianza esperanzada en Él y me mostró un camino, un itinerario nuevo que deseaba que emprendiéramos juntos en este camino Misionero.
Conforme transcurrían los días me sentía llamado a tener un intenso tiempo de encuentro con Dios y de abandono en el Dios de Jesucristo, que es amor y da vida abundante. Con humor, fe, ilusión y plena confianza en Él iban pasando los días y Dios iba mostrando su gracia para fortalecer mi persona en el nuevo camino que acababa de emprender. Diez días más tarde los médicos me dieron el alta con fecha fijada para la extirpación del tumor maligno. Los médicos alertaron de que era una operación difícil, en la que podía perder la vida, no obstante, Él estuvo a mi lado y con su fuerza pude y puedo seguir hoy caminando en el día a día a su lado: contento, feliz, alegre, ilusionado y esperanzado en el Señor de la vida y el amor.
A lo largo de este tiempo transcurrido desde entonces mi vida como Misionero Claretiano ha experimentado un cambio de 360º. La experiencia de una enfermedad grave con tan poca edad para lo que estimamos normal creo que hace madurar a marchas forzadas y te hace darte cuenta de lo que es realmente importante en tu vida. El cáncer está siendo la batalla en la que me encuentro luchando. Pero no estoy haciéndolo solo. Cuento con Dios que es mi apoyo, mi baluarte, el escudo donde me pongo a salvo y donde recobro cada día fuerzas para seguir dando la vida por amor al Evangelio. 
Durante este último tiempo de formación inicial he experimentado en mi vida y en la comunidad muchas de las cosas que nos dicen los formadores y los hermanos mayores de nuestras comunidades para perseverar en la vocación. Yo estoy seguro de que si las hubiera abandonado ahora no estaría compartiendo con vosotros lo que Dios sigue haciendo por mí, un inútil instrumento en sus manos.
Un pilar fundamental e importante en este último año y medio tras el descubrimiento del cáncer ha sido esencial para seguir caminando al lado de Dios: La oración. El encuentro personal y diario con Dios en la oración por medio de su Palabra ha sido importantísimo para mí. En ella he encontrado el rostro del Abbá de Jesús. Guiado por la fe en el Dios cercano con el que puedo hablar de mis miedos y dudas, mis incertidumbres y soledades ha sido y sigue siendo la experiencia que mueve mi vida hacia Dios. La escucha asidua de su Palabra ha sido motivo de fortaleza, fe, ilusión, sueño, amor, perdón, alegría en muchos momentos que han ido apareciendo en este tiempo. No es fácil vivir el cáncer sin la esperanza en el Hijo de Dios. En algún momento se ha hecho muy presente una frase de la carta de Pablo a los Gálatas (2, 19b-20): “Estoy crucificado con Cristo. Vivo yo, pero no soy yo quien vive, sino que es Cristo quien vive en mí: y mientras viva en esta carne, vivo de la fe en el Hijo de Dios, que me amó y se entregó por mí”. Es difícil y sería pretencioso decir que he llegado a vivir y a tener esta experiencia de Pablo y de nuestro fundador en mi persona, pero sí creo que la he vivido en modo análogo.
Puedo decir que me siento crucificado con Cristo en el dolor, el sufrimiento, la agonía de una enfermedad que en mi caso quiere terminar conmigo. La experiencia de sentirme crucificado en el sufrimiento del cáncer en algún momento me ha hecho sentirme abandonado por Dios, no obstante, he descubierto tras los nervios y cegueras que podía seguir abandonándome en sus manos porque es el único motor que mueve mi vida. Vivo contento, con fe, sin miedo ni temor a lo que venga en el futuro porque vivo de la fe en el Hijo de Dios que me amó y se entregó por mí. Con gran alegría puedo compartir con vosotros hermanos que el cáncer está siendo una oportunidad para configurarme con Cristo. No es fácil vivir esta situación desde la fe, con fuerza, con ilusión o alegría, es cierto, pero la fe es la que me mueve a ello y no mis propios esfuerzos.
La celebración de los sacramentos ha sido y sigue siendo un aspecto importante en mi vida diaria. Antes de descubrir mi enfermedad, con tristeza y dolor, comparto con vosotros que vivía la eucaristía de un modo mecánico, casi sin sentido; era una cosa más que había que hacer en el día a día. No obstante, la enfermedad me ha abierto los ojos para ver, vivir y experimentar que sin recibir a Cristo como comida y bebida de salvación mi cuerpo se queda sin fuerzas para seguir luchando esta batalla abierta. Recibir cada día el sacrificio eucarístico es para mí el gran momento del día, el momento en que el Señor me da fuerzas para seguir caminando a su lado. 
Una hermosa experiencia relacionada con los sacramentos ha sido las veces que he recibido la unción de los enfermos. No sabría describir la inmensa alegría y serenidad que producía en mí recibir este sacramento de fortaleza en la enfermedad. Dos días antes de operarme recibí este sacramento por primera vez en mi vida, me sentí muy lleno del amor de Dios, de su ternura y cercanía, de su gracia para afrontar la operación a la que tenía que someterme.
Un elemento por el que he dado muchas gracias y hoy día también doy gracias es por la Comunidad. Ha sido otro pilar importante y sigue siéndolo. Con pequeños y grandes detalles que han tenido conmigo. Ello me ha ayudado a curarme de la autosuficiencia. Algo habitual como vestirse, hacer la cama, mover un sillón, limpiar el cuarto, son cosas habituales que solemos hacer. Yo viéndome impedido he aprendido lo que es el servicio gratuito y amoroso en los sencillos gestos de los hermanos. La comunidad ha estado en todo momento preocupada por mí, en lo bueno y en lo malo, apoyándome, haciéndome sonreír, ayudándome a levantar cuando he estado más bajo de moral.
La experiencia del Padre Claret de sufrimiento a lo largo de su vida me sigue ayudando a seguir entregando mi vida por el Evangelio, a anunciar la Buena Noticia del Reino en medio de mis circunstancias y a descubrir que para mí Dios es suficientísimo. Como Hijo del Inmaculado Corazón de María me siento querido por la madre y acompañado en estos momentos de Cruz, desconcierto, sufrimiento y dolor. En ella veo la fidelidad y la confianza esperanzada en medio de la oscuridad del abismo, de la realidad cercana de la muerte. 
Comparto finalmente con vosotros mi situación actual. La enfermedad ha avanzado, ya hay metástasis por varios lugares. Los dos pulmones se encuentran habitados por el cáncer con una suelta de globos, el hígado aparece con varios puntos grandes de metástasis y el hilio esplénico o bazo. La realidad es que el cáncer sigue avanzando con agresividad y fuerza. Una cosa que tiene sorprendidos a los médicos es mi estado físico porque afirman que no se corresponden con los datos médicos contrastados por las pruebas. Ello me hace sonreír y me alegra porque sigo viendo la mano de Dios por medio de cada uno de vosotros con vuestra sencilla oración. Dios da vitalidad y fuerza en la mayor debilidad, los datos médicos son una prueba de que esta experiencia que sentimos es cierta. 
Tras fallar los dos tratamientos de quimioterapia anteriores, a mediados de julio los médicos llegaron a descartar la posibilidad de seguir administrando cualquier otro tratamiento. Sólo quedarían los cuidados paliativos y, en particular, la administración de morfina, cuando la situación se haga ya insoportable. No obstante, yo les he pedido que sigan intentando encontrar un tratamiento efectivo para este tipo de cáncer suprarrenal, que es poco habitual y manejable. Así, van a ensayar otro tipo de quimioterapia, aunque el pronóstico sea muy incierto. Entre tanto, sigo confiando en Dios y, como mi vida es don gratuito de su amor, quiero seguir luchando a su lado. 
Me quiero despedir de vosotros hermanos animándoos a seguir a Jesús pobre, casto y obediente al estilo de San Antonio María Claret, como un Hijo del Inmaculado Corazón de María que intenta vivir la hermosa definición que el fundador quiso que lleváramos encima siempre y que tanto me ha ayudado. Ahora estoy preparando mi profesión perpetua que, si Dios quiere, emitiré el día 23 de Octubre, en las vísperas de nuestra fiesta. 
Os invito, hermanos, a orar por mí para que aquél que ha comenzado la buena obra en mí la lleve a buen término. Y con alegría termino compartiendo mi texto vocacional, el texto que me sigue acompañando y que me sigue llenando de alegría para seguir el proyecto de Dios: “El Reino de los Cielos es como un tesoro escondido en un campo. El hombre que lo descubre, lo vuelve a esconder; su alegría es tal, que va a vender todo lo que tiene y compra ese campo. El Reino de los Cielos se parece también a un negociante que se dedicaba a buscar perlas finas; Si llega a sus manos una perla de gran valor, se va, vende cuanto tiene y la compra.”

            Vuestro hermano Ildefonso cmf

lunes, 17 de octubre de 2011

EXPERIMENTO "COMPARTE" (ACCION CONTRA EL HAMBRE)


Realmente, no necesita mucho más comentario. Si no os hacéis como niños... ¡seguiréis como hasta ahora...!

sábado, 8 de octubre de 2011

MUJERES NOBEL DE LA PAZ 2011



Ellen Johnson Sirleaf, de 72 años, es desde 2006 la primera mujer africana elegida democráticamente para presidir su país. Desde entonces, Liberia vive en paz.

Leymah Roberta Gbowee, de 39 años, es una activista conocida por haber organizado el movimiento pacifista que logró poner fin a la segunda guerra civil en Liberia en 2003, lo que posibilitó la elección democrática de Johnson Sirleaf.


Tawakkul Karman, es una política yemení y activista pro derechos humanos que lidera el grupo de Mujeres Periodistas Sin Cadenas, creado en 2005.

Esta vez, no hacemos ningún comentario. Sólo damos los datos y dejamos que vosotros saquéis vuestras conclusiones: ¿por qué 3 a la vez?, ¿cuántos mujeres han recibido nobel fuera de esta categoría de la paz?

viernes, 7 de octubre de 2011

¿QUIÉN QUIERE VINO?

DOMINGO XVIII, ciclo A. Mt 21, 33—43

Me cuesta entenderlo. ¿Quién puede olvidarse de asistir a una boda? ¿Quién puede cambiar un banquete por marcharse a sus tierras, por afanarse en sus negocios? Cuando alguien —un amigo, un hermano,… ¡el mismísimo rey!— dispone todo para la boda de su hijo y te hace partícipe, reservas el día, anulas otros compromisos, buscas un regalo y un vestido que expresen la alegría de haber sido invitado… Sobre todo si ese banquete es el de la felicidad eterna; si, según relata Isaías, «el Señor de los ejércitos preparará para todos los pueblos, en este monte, un festín de manjares suculentos, un festín de vinos de solera» (Is 25, 6-10). ¿Quién puede no querer ir a este banquete? Sólo quien no haya descubierto en su corazón hambre de cielo, sed de eternidad. Por eso, lo importante no es si somos sacerdotes o si estamos en los cruces de los caminos, si somos malos o si somos buenos; lo realmente decisivo es si nos atrevemos a vivirnos desde la sed y si nos arriesgamos a confiar en que Dios nos servirá el Vino mejor. Aunque no sepamos el día ni la hora. Aunque al festín se entre por la cruz y por la muerte. Entonces sí. Cuando aprendamos a caminar desde la alegría de estar convidados, todo manará: dedicaremos la vida entera a disponer el corazón, a esperanzar el alma, a amar a aquel que nos invita, a reunir a todos los posibles… A abrazar al Novio con traje de fiesta.

Adrián de Prado, cmf en www.acompasando.org

martes, 4 de octubre de 2011

FRANCISCO DE ASIS: LA ALEGRIA DE SER POBRE Y LIBRE


Si hay algún santo querido y admirado más allá de ser creyente, ateo, cristiano, musulmán, chino o polaco, es San Francisco de Asís, el "pobrecillo", el "poverello", el pobre.

Siempre me llamó la atención que alguien tan contracultural y alternativo, tan radical y exigente, fuera a la vez tan fraterno, tan sensible, tan delicado, tan afable. Tanto que no tenía problema en llamar hermano a un lobo o a una flor o la hermana muerte.
Siempre me llamó la atención que alguien como Francisco pueda despertar tanta ternura y tantos deseos de cambiar en una sociedad como la nuestra. Quizá porque en el fondo nos gustaría ser tan libre como él y poder tirar la casa por la ventana, tirar lo que nos sobra y lo que no, tirar lo que no es imprescindible y esperar que lo necesario nos sea regalado, como todo lo importante.
Recordar y recitar pausadamente a lo largo del día su oración más popular, una y otra vez, pueda ser un bonito mantra, un modo de respirar y vivir, que también nos vaya haciendo pobres y libres por dentro. ¿Por qué no?


Oh Señor, haz de mi un instrumento de tu paz:
Donde hay odio, que yo lleve el amor.
Donde hay ofensa, que yo lleve el perdón.

Donde hay discordia, que yo lleve la unión.
Donde hay duda, que yo lleve la fe.
Donde hay error, que yo lleve la verdad.
Donde hay desesperación, que yo lleve la esperanza.
Donde hay tristeza, que yo lleve la alegría.
Donde están las tinieblas, que yo lleve la luz.
Oh Maestro, haced que yo no busque tanto:
A ser consolado, sino a consolar.
A ser comprendido, sino a comprender.
A ser amado, sino a amar.
Porque: Es dando, que se recibe;
Perdonando, que se es perdonado;
Muriendo en Ti, que nacemos a la Vida Eterna.

lunes, 3 de octubre de 2011

CUENTA CONMIGO, COMPTA AMB MI


Los profes y el equipo de pastoral de Tremp (Lleida) nos envían esta canción y este video. Otro medio para profundizar en el lema y en todo lo que queremos compartir a lo largo del curso. ¡Muchas gracias!