sábado, 23 de marzo de 2013

De burros y borriquillas para la Semana Santa

Sí, sí... si es muy gracioso... ciertamente el burro o borriquilla despierta en nosotros sentimientos agradables, graciosos, sencillos... ¿no es verdad? Puede resultar hasta entrañable.
Otra cosa es que te proclamen rey o que te elijan para una gran misión y como señal de todo tu "poderío" pongan a tu disposición un burro.
Eso ya es distinto. Igual no nos hacía tanta gracia, ¿no?
Es lo que celebramos en Domingo de Ramos y así comenzamos los cristianos la Semana más santa del año. La Semana que nos recuerda dónde nos lo jugamos todo y de qué manera.
Pero se nos olvida.... Casi siempre o llegamos demasiado aturullados, casi sin enterarnos de que se termina la Cuaresma o tan preocupados por preparar lo que vayamos a hacer en Pascua, que no reparamos en burros ni en borricas.
Cantaremos hosanna al Hijo de David.
Descansaremos algo en el mejor de los casos.
Posiblemente, hasta participemos de las celebraciones en los días santos.
Y llegaremos al Domingo de Resurrección, más contentos que unas "pascuas", sin contar -una vez más- con un Dios que elige a burros y borriquillas para iniciar el momento esencial de su vida, para invitarte a ser de los suyos, para dejarte claro cuál es su estilo y sus medios.
 
Comenzamos la Semana Santa. ¡Como me gustaría no perderme ni un detalle!
¡cómo me gustaría, Señor, que me ayudes a no pasar por alto tu borriquilla, todo un programa claro para ser de los tuyos y como tú!
Ayúdame, Señor
 

1 comentario:

  1. JE SUS ELIGE LO MAS SIMPLE PARA MARAVILLAR CON SU OBRA.DONDE ESTA EL PECADO SOBREABUNDA LA GRACIA.
    FELICES PASCUAS.!!!!!

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