Seguro que recuerdas la escena en la película Shrek 4... Un niño impertinente, "tocinete" y un padre no menos pesado quieren escuchar el rugido del Ogro como curiosidad, divertimento, adorno....
- "¿Acaso no sabes que los ogros sólo rugen cuando están enfadados?... No querrás que me enfade, verdad?"
- ¡¡Ruge ya!!, ¡¡¡¡ruge ya!!!!, ¡¡¡¡ruge ya!!!!, ¡¡¡¡ruge ya!!!!...
Y claro, al final, ruge...
Graciosa escena para desdramatizar y reirte de ti mismo, de tus rugidos oportunos e inoportunos, de tus cabreos justificados y hasta provocados por más de un "tocinete" impertinente... ¿a que sí?
Y también, si lo prefieres, aviso para nuestras propias insistencias caprichosas... Esas que de vez en cuando tenemos todos repitiendo una y otra vez al mundo, a la realidad, a la gente: ¡¡¡ruge ya!!!
Hay pocos "tocinetes impertinentes", pero chica, el ruido que hacen... aunque siempre es peor el ruido con el que reacciono.
ResponderEliminar¡Bendita la risa que nos hace ver todo más fácil!